Esta semana el Papa Francisco manifestó que los homosexuales no deben ser juzgados ni marginados y que es necesario que sean integrados en la sociedad actual. Esta declaración fue parte de la charla que el pontífice realizó con casi un centenar de periodistas que lo acompañaron en su regreso a Roma desde Brasil el pasado día lunes.
El sumo Pontífice también aclaró que en las enseñanzas de la Iglesia Católica las conductas homosexuales están consideradas como pecaminosas y también se mostró crítico respecto al llamado «lobby gay» en la iglesia, frente a una pregunta sobre la existencia de grupos internos que se encuentran operando en el Vaticano apoyando a los curas homosexuales.
Textualmente el Papa Francisco afirmó sobre el asunto: «En un lobby no todos son buenos, pero si una persona es gay, busca al Señor y tiene buena voluntad, quién soy yo para juzgarla. El Catecismo de la Iglesia Católica explica y dice que no se deben marginar a personas que tengan esa orientación». El Pontífice católico se ha mostrado más conciliador que su antecesor, Benedicto XVI, al señalar que los integrantes del clero que sean homosexuales deben ser perdonados y no excluirlos.
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Fuente – El Universal
Foto – La Tribuna