El gobierno de Barack Obama anunció su respaldo al decreto del ejecutivo que prohibirá que los contratistas federales (empresas proveedoras del estado) discriminen a sus empleados sobre la base de orientación sexual o identidad de género. La nueva norma emitida desde el ejecutivo afectará a las empresas que actúan como contratistas federales y que se estiman que abarcan un 20% de la población del país, lo que supondrá un gran avance en materia de derechos para los trabajadores LGBT.
El decreto prohibirá concretamente cualquier tipo de discriminación en el ámbito laboral en todo el país, un hecho que puede calificarse como trascendental, dado que actualmente 29 estados de este país no tienen ninguna normativa que garantice la protección de trabajadores LGBT ante la discriminación laboral.
Este decreto puede entenderse como una respuesta a los legisladores conservadores del Congreso de EE.UU., que mantienen estancado desde hace meses el proyecto de ley ENDA (Ley de No Discriminación en el Empleo), que aplicaría este derecho a los trabajadores a nivel federal. En las últimas semanas la Casa Blanca ha decidido promover un camino alternativo para lograr aplicar esta norma. El decreto ejecutivo, que será firmado en los próximos días por el presidente Barack Obama y las diferentes asociaciones activistas LGBT estadounidenses, han mostrado su apoyo completo a la iniciativa.