El nombramiento de Rainer Maria Woelki como nuevo arzobispo de Berlín, considerado miembro del ala conservadora de la Iglesia Católica, no fue del todo bien recibido por algunos políticos y asociaciones de gays y lesbianas, habiendo proferido duras críticas por unas presuntas declaraciones suyas sobre el colectivo.
En ese sentido, el nuevo arzobispo de Berlín aseguró que la frase que se le atribuye en la que aseguró presuntamente que la homosexualidad «atenta contra el orden de la creación de Dios» nunca la ha pronunciado “públicamente”, cosa que tampoco viene a ser un consuelo teniendo en cuenta esa aclaración entrecomillada. Asimismo afirmó no pertenecer a la prelatura del conservador movimiento del Opus Dei, sino que únicamente realizó una parte de sus estudios en la Universidad Santa Croce de Roma.
Woelki habló acerca de que el Catecismo exige ante Dios situaciones ordenadas en cuestiones sexuales, pero que las personas no deben ser condenadas por su orientación sexual, “la Iglesia católica no pretende ser una institución que apunta con el dedo índice”. El arzobispo aseguró que su mano está tendida al alcalde-gobernador de Berlín, el socialdemócrata Klaus Wowereit, declarado abiertamente homosexual y que comparte gran parte de su vida pública con su compañero sentimental.
Fuente: ABC