Nicolás Maduro, presidente provisional y candidato presidencial de Venezuela, como su difunto antecesor no tiene ninguna medida a la hora de atacar a sus contrincantes electorales. Así se demostró hace pocos días en un multitudinario acto preelectoral, donde Maduro demostró su más recalcitrante homofobia al calificar al líder opositor Henrique Capriles y sus colaboradores de «maricones».
Bajo este discurso discriminatorio y homófobo Maduro pretende golpear a Capriles mediante la descalificación y el agravio. Textualmente el líder anti-gay declaró: «Yo sí tengo mujer, oyeron, me gustan las mujeres», al presentar a su esposa Cilia Flores, su compañera y amada esposa durante el discurso.
Luego de estos dichos, Capriles respondió: «Quiero desde aquí enviar una palabra de respeto y consideración a la colectividad LGBT, pero también de rechazo a las declaraciones homófobas de Maduro, aunque no es la primera vez que lo hace. Creo en una Venezuela sin exclusión y así lo digo al país, en una sociedad sin que nadie sea excluido por su orientación sexual, su raza o su credo». Capriles opinó que el comentario de Maduro es «fascismo» y de la «extrema derecha». La estrategia oficial contra Capriles llevó el año pasado a que la televisión estatal publicase un falso documento policial que declaraba prácticas homosexuales de Capriles.
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Fuente – 20M
Foto – El Universal