El pasado domingo se dio el cierre a la decimocuarta edición de los llamados Eurogames, los juegos olímpicos continentales del colectivo LGBT, juegos que contaron con la participación de unos 3.500 deportistas de toda Europa. Desde el miércoles 27, el torneo tuvo cinco días de competición, donde los deportistas, en su gran mayoría aficionados, han llegado a la capital húngara de toda Europa, pero también de Estados Unidos, y durante los últimos días midieron su competitividad en dieciocho disciplinas deportivas, como el fútbol, el tenis, el atletismo o ciclismo, entre otras.
Los Eurogames no solo han sido un evento deportivo, sino que también han sido un acontecimiento social que abarcó conciertos, exposiciones y muestras de cine, además de conferencias dirigidas al colectivo gay. De los tres mil deportistas convocados para este torneo, el noventa por ciento provienen de Alemania, el Reino Unido, Holanda y Rusia; contando la representación española sólo con una docena de deportistas. Un comunicado de prensa realizado conjuntamente entre dieciséis embajadas europeas dieron la bienvenida a este evento deportivo y dieron su apoyo al derecho de que la comunidad LGBT europea organice este tipo de eventos para confraternizar entre los diferentes países de la unión.
Este torneo también desató el debate sobre la intolerancia en Hungría, dado que el partido de extrema derecha húngaro, Jobbik, el tercero más grande del Parlamento, se pronunció abiertamente en contra del evento al calificarlo como una autentica «provocación». Por otra parte, la izquierdista Coalición Democrática (DK) del ex primer Ferenc Gyurcsány, aprovechó la ocasión de este evento para solicitar nuevamente al Parlamento húngaro que apruebe una ley a favor del matrimonio gay.
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Fuente – La Información
Foto – We Love Budapest