Al cumplirse diez años del primer matrimonio homosexual en Holanda, activistas LGBT de la organización COC recordaron que aun se mantienen diversas desigualdades jurídicas que son necesarias actualizar a la realidad actual de su país.
Vera Bergkamp, presidenta del COC, envío en estos días una carta dirigida a Mark Rutte, el actual primer ministro holandés, en la cual solicitaba que se actúe poniendo punto final a las desigualdades que aun existen en las leyes holandesas hoy día.
Uno de los puntos en controversia es la opción a la objeción de conciencia que disponen los funcionarios que les permite rechazar o evitar tramitar bodas entre personas del mismo sexo. Esta opción ha sido denegada en países como Canadá, España o Reino Unido.«Es impensable que alguien pueda negarse u objetar casar a judíos o a gente de color y que además este hecho estuviera protegido por la ley», declaró Bergkamp.
El COC también ha solicitado que se revean los casos de las parejas de lesbianas que recurren a la inseminación artificial, y la posibilidad de que el reconocimiento de ambas madres por el niño sea automático sin tener que recurrirse a un posterior proceso de adopción por parte de una de ellas, de la misma forma que se procede con las parejas heterosexuales.
Fuente: DM