La homosexualidad ha sido el increíble motivo por el cual las autoridades italianas denegaron la renovación del carne de conducir a un joven gay del sur de Italia. El damnificado de este atropello estatal ha sido Cristian Friscina, un joven de 33 años de Brindisi, en el sur de Italia, que tenía que renovar su carné de conducir tras cumplirse el plazo de diez años y fue a hacerse el reconocimiento médico exigido para tal actualización.
La sorpresa del caso fue conocer las razones que adjudicó el Ministerio de Transporte para tomar esta decisión, dado que por medio de una carta Friscina fue comunicado que perdía el permiso de conducir debido a que el informe medico elevado por un hospital militar declaró: «Sufre una grave patología que podría resultar un impedimento para la seguridad de la conducción». Según las autoridades competentes, el hecho de ser gay, en términos psicofísicos, «impedía [a Friscina] ser idóneo para tener el permiso de conducir».
Friscina luego de esta comunicación recurrió a diferentes organizaciones italianas en defensa de los derechos LGBT y al Partido Radical, conocido por su permanente defensa de los derechos civiles y personales, que han denunciado este incidente aunque desgraciadamente la noticia no ha trascendido como debería teniendo en cuenta la política anti-gay del actual gobierno donde las agresiones al colectivo y los actos de homofobia son parte de la vida cotidiana en la Italia actual.
Fuente: EM
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