A su llegada a Rusia, Madonna se ha puesto en pie de guerra contra los intolerantes ortodoxos rusos al pedir la libertad del grupo punk femenino Pussy Riot y también salió en defensa de los derechos de los homosexuales rusos, que enfrentan la mayor represión institucional de la última década. La cantante estadounidense inició esta semana su gira por las ciudades rusas, abriendo fuego a la polémica desafiando a los religiosos y al gobierno ruso, al salir en defensa de las tres integrantes del grupo Pussy Riot que durante estos días están siendo juzgadas por cantar contra el presidente Vladimir Putin en el altar de una catedral moscovita.
Madonna se manifestó totalmente en contra de la censura y aseguró que sería una verdadera injusticia que las tres componentes de Pussy Riot fueran condenadas a tres años de cárcel por sólo una broma. Durante su concierto en Moscú la cantante afirmó que estaba rezando por la libertad de las integrantes de la banda y solicitó su libertad, respaldando la posición de numerosas personalidades rusas y extranjeras que defienden los derechos de las tres chicas y consideran que su detención provisoria de cinco meses y el requerimiento de tres años de prisión son totalmente desproporcionadas en relación a los hechos cometidos.
«Sé que hay varias caras de una historia», declaró Madonna calificando como «valiente» la actuación de las jóvenes de Pussy Riot el 21 de febrero en la Catedral del Cristo Salvador de Moscú. «Las tres chicas -Masha, Katia y Nadia- hicieron algo valiente. Pero me parece que ya pagaron el precio por su desafío», opinó Madonna a los medios. «Merecen el derecho a estar libres. Rezo por su libertad», agregó Madonna en referencia a las chicas rusas, acusadas de «vandalismo» y de incitación al odio religioso. Madonna agregó que tiene la suerte de vivir en un país en donde goza de libertad de expresión.
Diversas organizaciones ortodoxas, han exigido la prohibición de los conciertos de la cantante en Rusia, adelantando que quemarán públicamente una foto de Madonna como señal del «futuro castigo divino y advertencia de los suplicios que le esperan el más allá». Madonna actuará este jueves en San Petersburgo, cuyas autoridades aprobaron este año una ley que prohíbe la propaganda homosexual bajo pena de multa. Hace unos meses, Madonna adelantó en su página de Facebook que durante su concierto en la antigua capital imperial «hablará en favor de la comunidad homosexual para mostrarles su apoyo y dar fuerza e inspiración a cualquiera que esté o se siente oprimido».
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Fuente – La Información
Foto – A809