Luego de un largo periplo judicial, un tribunal noruego finalmente ha denegado el asilo humanitario a Azad Hassan Rasol, un refugiado iraquí homosexual que lleva viviendo diez años en el país escandinavo.
De acuerdo con la corte, la misma reconoce la orientación sexual de Azad, así también como del potencial peligro que padecen los homosexuales en Irak, pero aún así le aconsejan «volver a casa y ser discreto», ya que Azad «debe obedecer las normas socio-culturales de su país.»
Azad manifestó a los medios noruegos que teme que su clan lo mate debido que los homosexuales no pueden vivir a abiertamente, y de hecho los llamados asesinatos de honor son un grave problema en la región kurda de Irak.
Odd Arne Henriksen, el novio de Azad desde 2006, declaró que si su novio fuera finalmente deportado el también lo seguiría, agregando «En nuestra familia no nos rendimos tan fácilmente. Luchamos hasta el final».
Los medios también revelan que Azad llegó a Noruega hace diez años, habla un buen noruego, tiene un trabajo estable y muchos amigos, aun así será deportado según la decisión de la justicia noruega. Durante los últimos dos años, medio centenar de solicitudes de asilo por parte de homosexuales han sido rechazadas.
Fuente: DM