Un reciente estudio llevado a cabo por la Universidad de Auckland analizó por primera vez en este país las experiencias e impresiones del personal a cargo del cuidado de ancianos LGBT en diferentes centros y residencias para la tercera edad. El estudio reveló que el personal a cargo cree que realmente la orientación sexual del individuo tiene poca influencia en su capacidad para atender a los residentes pero en cambio manejar las conductas y actitudes homófobas de algunos residentes hacia el anciano gay puede convertirse en un desafió.
La mayoría del personal también reconoce que las organizaciones ONGs que trabajan con estos grupos de ancianos LGBT son un recurso muy importante para darles apoyo.
«Considero algo importante toda experiencia de campo que está disponible en estos centros pueda materializarse en esto», afirmó el Dr. Gary Bellamy, investigador en la Escuela de Enfermería de la Universidad de Auckland.
Los resultados del estudio serán utilizados para crear material de consulta de utilidad para el personal de residencias y centros de mayores en Nueva Zelanda. El mismo será complementado próximamente por un estudio sobre las experiencias de los propios ancianos LGTB. Este estudio fue realizado en siete residencias de la ciudad de Auckland e involucró aun grupo de discusión de medio centenar de personas.
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Fuente – Gaystar News
Foto – Gaystar News