Los veterinarios del Zoológico de Toronto han decidido separar a la célebre pareja de pingüinos gays, y según lo declarado a los medios ha sido para preservar esta especie en peligro de extinción.
Los pingüinos machos sudafricanos, Pedro, de 10 años, y su novio Buddy de 20, viven juntos desde que llegaron al zoológico de Toronto a comienzos de 2011, provenientes del Pittsburgh National Aviary.
El plan del zoo es que los pingüinos sean emparejados con dos hembras de modo de que “tengan tiempo para conocerse y, si crean un lazo, eso es lo que estamos buscando”, explicó Bill Rapley, Director Ejecutivo de Conservación y Vida Salvaje en el zoológico.
Pedro y Buddy dormían juntos todas las noches, defendían su territorio, y se hacían llamados de emparejamiento y estar permanentemente el uno al lado del otro, y no mostraban ningún interés por las ‘candidatas’ seleccionadas para reproducirse y aumentar la especie, de la que por cierto existen muy pocos ejemplares.
Los dos pingüinos machos se comunicaban como lo hacen las parejas de su especie, por lo que los responsables del zoo decidieron separarlos para evitar que pase la temporada de apareamiento sin que Buddy y Pedro se crucen con hembras. El final feliz de esta historia es que según informado los pingüinos serán reunidos tras aparearse con el par de hembras.
Fuente: EA